Fuente: Andina
Lima, 22 de octubre de 2025 — En respuesta a la declaración del estado de emergencia en Lima y Callao, el gobierno ha anunciado medidas contundentes para reforzar la seguridad ciudadana y combatir la criminalidad en la capital y la provincia constitucional. Entre las acciones principales, destaca la implementación de un apagón electrónico en los centros penitenciarios, destinado a limitar el uso de energía eléctrica en los internos y facilitar el control de las actividades ilícitas.
El jefe del Consejo de Ministros, Ernesto Álvarez, informó que en las cárceles solo se permitirá la iluminación básica y la refrigeración de alimentos, eliminando el acceso a electricidad en celdas y pasillos para impedir la comunicación y el ingreso de armas o drogas por parte de los internos. Además, se intensificarán las operaciones en las cercanías de los penales, donde se han detectado construcciones precarias que sirven como escondites para armas, celulares, chips y otros objetos prohibidos, que en ocasiones terminan siendo ingresados a las prisiones por agentes penitenciarios en rondas nocturnas.
Para robustecer la lucha contra las organizaciones criminales, las autoridades han decidido unificar los servicios de inteligencia de diferentes instituciones, incluyendo la Policía Nacional, la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI), las Fuerzas Armadas, el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) y la Unidad de Inteligencia Tributaria. El objetivo es identificar y desarticular de manera efectiva las redes de extorsión y otros delitos que operan en la clandestinidad. Álvarez sostuvo que, con esta coordinación, el Estado podrá realizar intervenciones sorpresa en lugares clave, logrando así la captura de líderes y miembros de bandas criminales.
Respecto a los eventos públicos, el gobierno ha establecido que aquellos que superen los 3,000 asistentes requerirán autorización previa para su realización. Los eventos con menor aforo no necesitarán permisos especiales, pero las fuerzas de seguridad tendrán una presencia constante para garantizar el orden. Álvarez también resaltó que el mando de las operaciones está en manos del comandante general de la Policía, con respaldo de la Fuerza Armada, la participación del alcalde de Lima y del gobernador del Callao, además de la colaboración de juntas vecinales en la vigilancia y protección de la comunidad.
Estas medidas buscan fortalecer la seguridad en la ciudad y mostrar un compromiso firme del gobierno para reducir la criminalidad en un contexto de emergencia.


